Golpe a la clase media: las tarifas de servicios públicos subieron hasta 900% durante la gestión Milei

El sinceramiento tarifario impulsado por el gobierno de Javier Milei provocó un alza sin precedentes en los servicios públicos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). En menos de dos años, el gas subió 913%, el transporte 852% y la electricidad 228%. Los sectores medios, sin subsidios plenos, son los más afectados.
El llamado sinceramiento tarifario que el presidente Javier Milei implementó apenas asumió en diciembre de 2023, dejó una marca profunda en la economía de los sectores medios del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). En menos de dos años, el costo de los servicios públicos se multiplicó por seis, con aumentos que en algunos casos superaron el 900%.
Según el Observatorio de Tarifas y Subsidios del IIEP (UBA-CONICET), entre diciembre de 2023 y octubre de 2025 la canasta de servicios públicos del AMBA se incrementó un 514%, impulsada principalmente por las subas en gas natural (913%), transporte (852%), agua (376%) y energía eléctrica (228%).
En el mismo período, la inflación general acumuló un 171%, lo que refleja que el ajuste tarifario se movió muy por encima del promedio de precios.
El costo de vivir en la era del ajuste
Si un hogar de clase media pagaba alrededor de 50 mil pesos mensuales en servicios en noviembre de 2023, hoy destina cerca de 300 mil pesos a gas, luz, agua y transporte. Este salto explica las crecientes dificultades para “llegar a fin de mes” que reconocen amplios sectores del conurbano bonaerense y la Ciudad de Buenos Aires.
El impacto fue desigual. Mientras los hogares de menores recursos en villas y asentamientos continúan recibiendo subsidios directos –a través de pagos que los gobiernos de la Provincia y de la Ciudad realizan a distribuidoras como Edesur, Edenor, Metrogas o Naturgy–, los sectores medios absorbieron la mayor parte del ajuste.
Los jubilados con vivienda propia, sin cobertura social ni tarifa social, son otro de los grupos más castigados por la política tarifaria.
Menos subsidios, más presión en los hogares
Durante 2025, los subsidios energéticos sumaron unos $6 billones, una caída del 46% respecto del año anterior.
En promedio, en el AMBA las tarifas cubren apenas el 50% de los costos reales, mientras que el Estado asume la mitad restante. Sin embargo, esa cobertura es dispar: los sectores más vulnerables pagan mucho menos, mientras que los contribuyentes de clase media afrontan los costos plenos.
Una leve desaceleración, pero sin alivio
Pese a la magnitud del aumento acumulado, en lo que va de 2025 la canasta de servicios públicos muestra una desaceleración: aumentó 21% entre enero y octubre, frente a una inflación estimada del 24%.
El incremento interanual más fuerte fue el del transporte (36%), seguido por gas (24%), agua (18%) y energía eléctrica (16%).
Aunque el ritmo de subas se moderó, las facturas siguen representando una porción cada vez mayor del ingreso mensual promedio de los hogares.
El nuevo mapa del consumo energético
El ajuste tarifario transformó la estructura del gasto familiar urbano. El peso de los servicios públicos pasó a representar más del 20% del ingreso disponible en numerosos hogares del AMBA, un nivel comparable al de los años de crisis económica.
Mientras tanto, el gobierno defiende la medida como un paso necesario para “ordenar las cuentas públicas” y reducir el déficit fiscal.
En la práctica, la clase media –tradicional motor del consumo interno y de la economía argentina– se convirtió en la variable de ajuste del modelo de austeridad, soportando una presión tarifaria sin precedentes en la historia reciente.
Fuente: NA



