Los límites a la reelección presidencial

En una entrevista en el programa Tendencias que conduce Pablo Galeano y que se emite por EcoMedios AM 1220, el juez Julio Báez analizó las implicancias de limitar las reelecciones indefinidas en Latinoamérica. El juez de Cámara por ante el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional N° 4 sostuvo que con esas restricciones se “protege la alternancia y el pluralismo político”
Pablo Galeano: ¿Cuál es su opinión sobre la limitación a la reelección presidencial?
Julio Báez: En agosto de este año la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) analizó las reelecciones indefinidas y profundizó en los límites que hay que colocar a las reelecciones indefinidas para evitar que una persona se perpetúe en el poder y asegurar el pluralismo político y la alternancia. Se protege el sistema de pesos y contrapesos y podemos establecer que los partidos políticos que compiten entre sí se vean como adversarios y estén subordinados a un interés superior y común que es el de la Nación.
En una tesis doctoral que defendí en la Universidad de Belgrano, hablaba de la necesidad de poner un límite a los retornos presidenciales y llegamos a la conclusión que el modelo de Estados Unidos era el que debíamos seguir, con lo cual un presidente después del segundo mandato ya no puede ejercer nunca más un cargo público.
PG: El hecho de que sea una opinión consultiva ¿Qué implicancia tiene? ¿Los países pueden tener una condena moral o hay una obligación que los fuerce a cumplir estas resoluciones?
JB: No hay una coacción en el sentido de que no hay una sentencia de fondo, como cuando la CIDH declara la responsabilidad del Estado en determinada materia y lo obliga a realizar una prestación concreta. En este caso particular, una opinión de la CIDH opinión sobre el caso colombiano se podría proyectar no solo sobre los gobiernos nacionales sino sobre los municipales.
En determinados contextos geográficos en toda Latinoamérica se verifican situaciones de reelecciones indefinidas y perpetuaciones en el poder que nos parecen que son contrarias al sistema de alternancia de las distintas fuerzas políticas y que hacen a una democracia. Una de las características que tiene nuestra democracia es la posibilidad de instituciones horizontales donde tenemos diferentes miradas, visiones y donde aparecen los necesarios consensos producto de acuerdos para llegar a las grandes realizaciones que son las del bienestar de la Nación.
PG: Esta realidad no se da solo en los poderes ejecutivos nacionales, sino también en los provinciales y municipales
JB: La CIDH habla en marco general de la necesidad de limitar las reelecciones indefinidas. No hay nada mejor que la alternancia, las sucesiones, los enfoques y las miradas diversas. No al pensamiento único, monolítico. Nos debemos entre todos grandes debates, grandes consensos y a partir de la discusión siempre surge una postura mayoritaria.
PG: ¿Hasta dónde la sociedad mundial está evolucionando o involucionando en este sentido? ¿Este pronunciamiento de la CIDH tiene algo que ver con una desvirtuación del concepto de democracia?
JB: A partir de esta resolución se puede generar jurisprudencia para fijar límites a la concentración de poder, erradicar la aparición de gobiernos autocráticos con poco apego a las formas democráticas y a la tentación de someter o colonizar los otros poderes. Uno de los límites, no el único, es colocar una suerte de pausa para el gobernante de turno. No hay mejor enfoque que la renovación, la alternancia, las miradas diferentes. A medida que va pasando el tiempo aparecen nuevas generaciones con otras ideas, otras visiones, otros enfoques. Bienvenido sea, si no nos quedamos con dirigentes atornillados a un sillón, lo cual no me parece compatible con los rasgos de la democracia.