Por Jorge Cuello*

En una maratónica sesión que se inició el día de ayer y culminó hoy en la Cámara de Diputados, se aprobaron dos leyes (Ley de Bases y fiscal e impositiva) que van a generar un amplio retroceso para el futuro del país.

Con el apoyo de los bloques de La Libertad Avanza, el Pro, Hacemos Coalición Federal y una gran parte de legisladores radicales los diputados le dieron vía libre a las iniciativas que reclamaba el gobierno neoliberal de Javier Milei.

Entre otras cosas a través de la ley de bases el gobierno nacional podrá eliminar organismos públicos, privatizar empresas estatales y despedir sin causa a empleados públicos. 

De aprobarse esta ley en el Senado, los trabajadores perderán derechos laborales al aumentar el periodo de prueba de 3 hasta 6 meses y en algunos casos 1 año, se restringe el derecho a huelga y habilita a los empleadores a evadir el pago de las cargas sociales eliminado las respectivas multas para quienes no lo hagan.

A las mujeres le achican de 45 a 10 días la licencia laboral pre parto y elevan de 60 a 65 años la edad de las mujeres para que puedan acogerse al beneficio de jubilación anticipada. 

Por otra parte, con la ley del paquete fiscal enviado por Milei al Congreso y aprobada hoy en Diputados van a favorecer a las grandes fortunas mientras que a los sectores de menores recursos se le aplicará una mayor carga impositiva.

De esta forma, va a reducirse el pago de impuestos sobre bienes personales a los sectores más ricos de la población y se habilitará un blanqueo de capitales para grandes fortunas provenientes de la evasión fiscal o actividades ilícitas como el narcotráfico al mismo tiempo que aumentara la cantidad de trabajadores que deberán pagar impuesto a las ganancias, aumentara el pago de monotributo y se eliminara el monotributo social para los trabajadores independientes de bajos ingresos. 

Esperemos que la Cámara de Senadores no habilite en su tratamiento la aprobación de estas leyes porque al igual que en la década del noventa durante la era menemista se liquidará el patrimonio nacional, se perjudicará a los trabajadores y a los sectores medios y bajos de la sociedad y se terminará beneficiando a las personas más ricas de la Argentina.

* Abogado y Docente de la UBA