“La literatura en las aulas es libertad, no censura”, afirma la Unión de Escritores

En respuesta a las recientes críticas hacia los planes de lectura escolar, la Unión de Escritoras y Escritores emitió una contundente declaración reafirmando el valor de la literatura como herramienta educativa y de reflexión en las escuelas. La declaración resalta la importancia de estos programas para democratizar el acceso a la lectura, fomentar debates y fortalecer la formación integral de los estudiantes, en un contexto de creciente exposición a contenidos digitales desregulados.

El texto difundido por las redes sociales subraya que los planes de lectura, diseñados por especialistas y docentes, no solo abordan temáticas complejas sino que lo hacen mediante obras literarias seleccionadas por su calidad estética y formal. “Detrás de cada plan están los escritores y especialistas encargados de seleccionar el material, en relación con sus aportes estéticos y temáticos”, explica el texto, destacando el rol de los estados provinciales en la adquisición y distribución de estos recursos educativos.

Además, enfatiza la labor de los bibliotecarios y profesores como mediadores clave entre los textos y los estudiantes, quienes desarrollan actividades específicas para abordar los contenidos curriculares.

Críticas descontextualizadas y riesgos para la libertad de expresión

La Unión cuestiona las acusaciones recientes hacia ciertos contenidos de los planes, calificándolas de “recortes descontextualizados” que no consideran el dispositivo pedagógico en su conjunto. Según el texto, estas críticas no buscan aportar a los debates educativos, sino cancelarlos.

“Las declaraciones oídas en estos días sobre distintas obras literarias conducen a climas claramente persecutorios (…) y remiten a un pasado autoritario al que no quisiéramos volver nunca más”, alerta la organización.

El documento también advierte que estas posturas erosionan la libertad de expresión, un pilar fundamental del sistema democrático. En contraste, la literatura desafiante en el aula es presentada como una herramienta de empoderamiento para los jóvenes, especialmente en un contexto social marcado por la exposición a múltiples estímulos digitales.

Llamado a fortalecer los espacios de debate

Lejos de considerar a la literatura un problema del que proteger a los estudiantes, la Unión sostiene que los textos literarios son esenciales para abordar cuestiones relevantes con profundidad y responsabilidad. La declaración concluye con un llamado a fortalecer los planes de lectura y a reconocer el trabajo de los profesionales que los desarrollan y sostienen.

Este posicionamiento reafirma el compromiso del sector literario con la educación pública y el desarrollo crítico de los jóvenes, recordando el rol insustituible de la literatura en la construcción de una sociedad democrática.